Hola soy Mahdi y este mensaje especial es traído por FatimaTV.es en honor al nacimiento del Imam Ali (P)

Hoy es un día en el que quiero presentarles un personaje excepcional. No entraré en detalles  sobre fechas, linajes o logros, que posiblemente puedan encontrar a través de otras fuentes o googlearlo, si no más bien quiero contarles de quién fue y que significó para la humanidad.

Quiero hablarles sobre este gran personaje, porque es hoy particularmente la fecha en que se recuerda su nacimiento, un nacimiento bendito y qué de paso significa el nacimiento de la supremacía de la verdad, la justicia, la elocuencia y la ciencia.

Su supremacía no cabe en duda en las mentes de los intelectuales, la gente de la espiritualidad y de los justos. Y es evidente, de cómo este hombre trascendió el tiempo, las fronteras de ideologías y credos, convirtiéndose en un hombre universal, como la misma fe que defendió toda su vida.

Tan es así que podemos ver en la ONU, han sido mencionados seis de sus innumerables dichos y enseñanzas y que podrán observarse en una carta que el mismo escribió a su gobernador, en tiempos que era el Califa del Islam, en los que aconsejaba plenamente la justicia y la equidad entre todas las personas sin distinción alguna.

A tal punto que el Secretario General de la ONU en una histórica resolución dijo:

“ El Califa Ali Ibn Abi Talib es considerado el gobernante más justo que apareció durante toda la historia de la humanidad (después del profeta Mohammad)”

Ciertamente este es Ali, el Príncipe de los Creyentes, ya que el mismo profeta dijo:

“¡Oh Ali! Tener amistad contigo es signo de fe y oponerse a ti es hipocresía.”

Quiero hacer mención de un conocido hecho ocurrido durante la época en que el Imam Ali (P) era Gobernante del Imperio Islámico o Califa y que demuestra su estatus y valor sin competencia en dicha época y más aún en la actualidad, (hasta la venida de aquel que reivindicará el derecho de los oprimidos al final de los tiempos).

Se cuenta que un hombre judío un día tomó la armadura del Imam Ali, la cual había caído de uno de los camellos del Imam; y al tomarla afirmó que le pertenecía, llegando a ir a la corte para testificar en contra del Imam.

Acaso el hombre judío, no estaba ante el Gobernante de la época, cabeza mayor del estado? Y aún así lo llevaba a la corte, para hacer su reclamo, el cual era tras de eso, injusto?

El Imam aseguraba ante el juez que esa armadura le pertenecía, siendo que el hombre judío respondía: “No es mía, está ahora en mis manos. “

¿Han visto ustedes a una cabeza de estado o nación, un rey o gobernante yendo por su propia cuenta para ser juzgado?¿En qué parte de la historia ha sido esto visto, mas que solamente durante la época de gobierno del Imam Ali?

Ante los continuos reclamos del hombre judío, el Imam le dijo, bueno vamos al juzgado a solucionar esto que dices, te pertenece. Ante la presencia del Imam, el juez, le llamo, diciendo: “¡Oh Principe de los Creyentes!” a lo que de inmediato el Imam se volteo y le dijo al juez:

“Acá no, no en la corte, debes de tratarnos a ambos de forma equitativa. Si me llamas por mi título y luego llamas a este hombre judío solo por su nombre, estarías siendo injusto, y debes de tratarnos a ambos con justicia y sin diferencias”

Exaltado Sea Dios.

¿Cuál clase de justicia implementaba Ali Ibn Abi Talib? Si aún evidentemente era el dueño de esa armadura.

El Juez le pregunto al Imam Ali: “¿Tienes a algún testigo o alguna prueba de que esa armadura es de tu pertenencia o que haya estado en poder tuyo y haberla perdido?

A lo que el Imam, le respondió que no. “No tengo ninguna prueba, pero me pertenece”.

Ante esto el Juez, al ver que no hay pruebas que evidencien que ello le pertenece al Imam Ali (y aún sabiendo con certeza que el Imam está diciendo la verdad) el juez determina, que al no haber ninguna prueba que respalde el alegato del Imam, el judío es quien tiene el derecho sobre la posesión de la armadura. Esto puesto que bien sabemos, que ante la ley y en una corte debes de presentar alguna evidencia para sustentar un alegato, defensa o acusación.

Cuando el hombre judío ve el modo en que se desarrollaron los eventos y cómo fue juzgado el Imam Ali, se pone de pie y dice:

“¡Oh Príncipe de los Creyentes! esta armadura te pertenece y yo la tomé y estuve mintiendo respecto a que era de mi propiedad, pero ahora que he sido testigo de que tú, el propio Gobernante, te has humillado viniendo a esta corte, con plena humildad y me has tratado con total equidad, me he dado cuenta, que eres tú el verdadero representante de Dios Exaltado sea,  en la tierra y doy testimonio que no hay mas divinidad que Dios y que Muhammad es el mensajero de Dios. “

Con esta historia sobre el Imam, hemos sido testigos de quién es realmente Ali, el símbolo sin igual de Justicia, un hombre que no temía ser juzgado de la misma forma que el resto de las gentes,  aún teniendo él la razón y que su método siempre fue el respeto, la caridad, la justicia y la misericordia, únicos atributos poseedores de aquellos cercanos a Dios.

El Imam Alí es recordado universalmente, por quienes realmente lograron profundizar en su personalidad y santidad, vemos el ejemplo de no musulmanes que elogian al propio Imam, tal como lo hizo Edward Gibbon, historiador Británico del siglo 18 que sobre el Imam dijo:

«El nacimiento, el parentesco y el carácter de ‘Alî, lo diferenciaba de entre el resto de los hombres de su tierra, esas cualidades justifican plenamente su designación como Califa y único sucesor de Mahoma. El hijo de Abu Tâlib era, por derecho propio, el jefe de los Bani Háshim y el príncipe heredero o guardián de la ciudad de La Meca y de la Kaaba. ‘Alî poseía las cualidades de un poeta, un soldado, y un santo.  Su prudencia y sabiduría aún perduran en una extensa colección de enseñanzas morales y proverbios filosóficos, y cada uno de sus antagonistas, en los combates de la lengua y de la espada, fueron abatidos por su elocuencia y su valor. Desde la primera hora de su misión hasta los últimos rituales de su funeral, el Mensajero de Dios (en referencia al Profeta Muhammad) no fue jamás olvidado por el generoso amigo, al cual gustaba llamar su hermano, su substituto, y el fiel Aarón de un segundo Moisés».

Para cerrar este episodio especial sobre el Imam Ali, quiero recordar las palabras del propio Imam a modo de consejo para Malik Al Ashtar, en una carta dada a este compañero, refiriéndose al gobierno y la ética política en el Islam.

“En verdad, que (tus súbditos), son de dos clases: o son tus hermanos en la religión, o son iguales a ti en la Creación. Ellos, cometerán faltas y errores. Puede que actúen mal, con intención o sin ella. Por lo tanto, extiéndeles tu perdón y condonación, de la misma manera en que amas el hecho de que Dios, extienda Su perdón y condonación a ti”

Este es Ali hijo de Abu Talib, este es el Príncipe de los Creyentes, sucesor de Muhammad, guía de la fe y los asuntos de todos los musulmanes, este es un hombre que ha impresionado a la humanidad entera, sin importar raza, credo o pensamiento, simplemente es aquel, que es Amado por Dios, este es Ali, el poseedor de la verdad y el conocimiento, el más perfecto de los hombres luego de Muhammad (La Paz de Dios sea con Él y su familia).

Cierro recordando al gran escritor libanés, de origen cristiano, Khalil Gibran que dijo de Ali:

“En mi opinión, 'Alī fue el primer árabe en tener contacto y conversar con el alma universal. Murió, mientras la oración estaba entre sus dos labios. Los árabes no se dieron cuenta de su valor hasta que aparecieron entre sus vecinos persas, algunos de ellos quienes conocían la diferencia entre gemas y la grava”

No me queda más que agradecer su atención a este episodio especial por el Nacimiento del Imam Ali. Les recuerdo que pueden encontrar esta transmisión y mucho más contenido en las cuentas de FatimaTV en Spotify, iTunes, Google Podcast y Soundcloud.

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Hasta pronto