Bismihi ta´ala.

Hola. Hoy damos inicio con una serie corta de contenidos especiales, en honor al Príncipe de los Creyentes el Imam Ali (AS).

Con esto conmemoramos una fecha de mucha tristeza para los amantes de este gran hombre quien fuese el Corán viviente, el líder de los musulmanes en su época y el más amado por el Profeta del Islam.

Alguien a quien la humanidad no llegó a conocer en su profundidad y que si realmente hubiesen sus contemporáneos visto su grandeza, hubiésemos alcanzado todos como humanidad, niveles jamás imaginados.

Hoy tan solo quiero que miremos a través del alma y el espíritu del Imam Ali (La Paz de Dios sea con el), no solo ver los aspectos más externos de él, si no mirar su interior, más allá del espíritu y un poco más cerca de su intelecto y lo que en verdad la humanidad perdió al rechazarle y al momento de su partida.

El Imam Ali, quien escribiera el libro “Nahjul Balagha o La Cumbre de la Elocuencia” es aquel, conocedor de lo que el mismo profeta del Islam era conocedor. 

Su elocuencia y conocimiento de las ciencias, de aquello que regía al mundo y el universo en general no tuvo en su momento par.

¿Qué es lo piensas cuando escuchas sobre el Imam Ali (P)?

Por lo general entre los musulmanes, al crearnos una imagen del Imam Ali, vemos a un comandante con una valentía sin parangón, a un líder incorruptible, a un guerrero sin mácula en la causa de Dios, pero ¿Acaso hemos pensado o al menos logramos entender al Ali intelectual?

Hoy más allá de enumerar sus logros en la lucha por la defensa en el camino de Dios, su liderazgo y demás hazañas, quiero que podamos ver una faceta, no muy común de ser analizada entre nuestros círculos y es precisamente esa la línea que quiero que crucemos.

Cruzar una línea que sigue siendo la línea entre el Alí (P) que aún insiste en que se le conozca, una línea que solo tiene un nombre y es el de Amir Al Muminin Ali Ibn Abi Talib (P). Misma que nadie puede llegar a tener la audacia de decir ha estado delante o detrás de ella.

El Imam Ali (P) decía: “Saluni Saluni” ¡Pregúntenme, Pregúnteme,  antes de perderme puesto que tengo más conocimiento de los caminos del cielo, que el de los de la tierra!

¿Para qué luchamos por lo que la tierra contiene? Si lo que ella contiene nos es nada mayor en comparación con lo que contienen los cielos; decía el Imam.

Tenemos otro dicho del Imam Ali (P) que dice:

 “Si los velos entre mi y Dios fuesen removidos, no aumentaría ello mi fe en Dios Exaltado Sea sin duda alguna.”

Este es Ali Ibn Abi Talib, el Príncipe de los Creyentes, el hombre de la faceta espiritual e intelectual que conoceremos, no el personaje histórico.

En ese dicho hay un hombre que está diciendo que si los velos entre Él y Dios fuesen removidos, esto no afectaría su fe en Dios.

Una vez  le preguntaron; “Has visto a Dios, y el dijo:

“Como no voy a adorar a un Dios que no he visto? Pero no Le he visto con los ojos, lo he visto con la certeza de mi corazón, este corazón que ha probado el placer de Dios, Exaltado Sea.

Veo Sus maravillas en Su esencia real, en Su realidad verdadera.”

Cuando el Imam Ali dijo:

“Somos los príncipes del discurso teológico, de la comprensión, de la racionalidad y de la reflexión”

¿Que creen que esto significaba?

El significado de esto es que cada ser humano logra ver la realidad en su capacidad o su parte (y claro de forma limitada). Pero el Imam Ali ve la realidad tal cual es, y sobre esto ha dicho:

“Antes de hacer cualquier cosa, veo a Dios antes, veo a Dios en eso y veo a Dios después de eso”

Ningún otro hombre de su época había dicho estas líneas excepto Alí Ibn Talib y lo que en ello quería decir era:

“Si confían en mí y en lo que guío, créame, les mostraré a Dios, Exaltado Sea. Tengan fe en mí cuando les digo que me pregunten antes de que me pierdan. Con eso les mostraré a Su Señor y verán a Dios con Su claro esplendor.”

Y es que cuando damos una breve mirada a los compañeros del Imam Ali (La paz de Dios sea con él) en algunas narraciones cuentan la manera en como el Imam se abrió con ellos de una forma que otros no pudieron hacerlo.

Por ejemplo, uno de esos compañeros es Kumayl Ibn Ziad donde hablaba de cosas magníficas que había vivido junto con el Imam Ali (P).

Hay un hadiz llamado, hadiz “Al Haqiqa o hadiz de la realidad”. Este hadiz es espléndido y vemos en él,  al Imam Ali en la base de un mundo totalmente diferente al nuestro.

Cuenta Kumayl en este hadiz que un día ambos iban cabalgando y el Imam Ali iba detrás de él y de un momento a otro simplemente se volvió hacia el Imam y le dijo:

 “¿Cuál es la verdad?, ¿Cuál es la verdad?

A lo que el Imam le respondió: “¿Qué tienes que ver con la verdad?” y  Kumayl le dice:

“Acaso no eres tú la puerta a los secretos de Dios?” siendo entonces que el Imam le dice:

“¿No soy acaso tu compañero de los secretos?”

Entonces el Imam  continuó diciendo:

“¡Oh Kumay! Lo que apenas es un rocío en ti, se desborda en mí.” Y es entonces cuando Kumail cuenta que le miró y le dijo: “cuéntame más, que en verdad deseo conocer la verdad” insistiendo.

Entonces el Imam le miró y dijo:

“La revelación de las majestuosidades de la glorificación sin indicación” (esto no sé cómo explicárselo a ustedes, yo mismo no se su significado, y si tu conoces su significado entonces deberías ser el Imam, pero eso solo le corresponde a Ali Ibn Abu Talib)

Ante la respuesta del Imam, Kumail le dijo: “Por favor dime más” y el Imam dijo:

“La negación de la especulación, mediante la realización de la realidad.”

Y Kumail le dijo por favor dime más.

El Imam lo miró fijamente y le dijo:

“La negación de las realidades, mediante la interpretación de los secretos.” Y Kumail siguió diciendo, por favor dime más y el Imam dijo:

“La apreciación de la Unicidad Divina, a través de la comprensión de los atributos de la Divina Unicidad.” Y de nuevo Kumayl dijo, por favor dime más y el Imam dijo:

“Una luz que iluminaba desde el pre eterno amanecer, ahora en las mesas talismáticas de la Divina Unicidad.” Y Kumayl dijo; dime más y el Imam le dijo:

“No, recoge las lámparas que ya es tiempo de la oración de la mañana o Salatul Fajr.”

Oh amigos y amigas, tan solo 5 líneas cuya mención tomó lugar desde el Magrib y hasta el Fajr (ósea desde el momento del atardecer y hasta el amanecer del día siguiente).

Este es el tiempo que le tomó al Imam Ali (P) decirle solo 5 líneas a su compañero a lo que me pregunto:  “¿Que es aquello que ocurrió en esas horas?” ¡no lo sabemos¡

Kumayl dijo, nunca más le pregunté nada al Imam luego de eso y todo lo que he contado es la verdad de tal cual ocurrió.

El me dio 5 respuestas las cuales yo nunca entenderé.

Este queridos es el ser intelectual conocido como Ali Ibn Abu Talib.

El Imam se mostraba tal cual, solo a unos pocos.

Cuenta el mismo compañero, Kumayl que una vez vio al Imam Ali (La Paz de Dios sea con el) arrodillarse y meter su puño en la tierra y le preguntó:

“¿Oh Imam que estás haciendo?” a lo que el Imam le respondió:

“Oh Kumayl, tengo tanto por darle a la humanidad, pero ella, no puede tomar lo que soy, así que puse sobre la tierra mi puño, puesto que la tierra me entiende más, de lo que la gente que la habita, puede.”

Se cuenta que un hombre una vez dijo:

“¡Encontré a Dios en la noche que fue herido de muerte el Imam Ali¡ Esa noche vi a un hombre ser golpeado vilmente con el filo de una pesada espada en su cabeza mientras se prosternaba en oración (en sujud) y lo primero que hizo después de ser herido de muerte, fue pedir que le diesen agua a su asesino.”

El hombre prosiguió diciendo:

“Mi corazón en ese instante me dijo que fuese lo que fuese que ese hombre herido adorase, yo quería adorarlo por igual. Por que si adorar a un Dios así, hace a un Ali Abu Talib hacer lo que recién fui testigo, quiero entonces adorar al Dios que adora Ali Ibn Abu Talib (AS).”

Quien cuenta esto, insistió diciendo: “En verdad si adorar a Dios, sea el nombre que sea de ese Dios, ¡nombra a cualquiera!; si adorar a Dios en verdad hizo que Ali Abu Talib fuese tan humilde, en verdad juro que quiero al Dios de Ali Ibn Abu Talib.”

Amigos y amigas, este es Ali ibn Abu Talib (La Paz de Dios sea con el) ese hombre de entre todos los seres humanos, que no fue apreciado ni valorado por los tercos e hipócritas de su época.

Dice el famoso poeta cristiano de origen Libanés, Khalil Gibrán respecto al Imam Ali (P):

“En mi opinión Ali fue el primer árabe en tener contacto y conversar con el alma universal. Murió mientras la oración estaba entre sus dos labios. Los árabes no conocieron de su valor hasta que aparecieron entre ellos sus vecinos persas; algunos de ellos, quienes conocían la diferencia entre las gemas y la grava.”

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hasta pronto.