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Descripción

Analizamos las recomendaciones del Imam Rida, el octavo Imam sobre la necesidad de cuidar nuestro corazón o alma. No distraernos del recuerdo sincero de Dios. No podemos negar el Poder de Dios.

Transcripción

(Saludo en Árabe)

 

            En el nombre de Dios, el clementísimo, el misericordiosísimo, la bendición y la paz sean con Muhammad y su familia purificada y con todos los profetas especialmente con Jesús y Muhammad.

 

            ¿Por qué decimos las bendiciones sean sobre el profeta y su familia purificada? Porque tenemos tradiciones del profeta y tenemos versículos que hablan del lugar especial que la familia del profeta tiene vinculada al profeta, no es por el solo hecho de que uno menciona a alguien y dice bueno y su familia, en la familia del profeta hubo enemigos del profeta, Abu Lahab era tío del profeta y fue enemigo maldito en el Corán, se enfrentó contra él, lo atacó, intentó todo tipo de maniobras para impedir su misión, era uno de los líderes de la oposición al profeta y era su familia.

 

            Entonces cuando decimos “la bendición sea para él y su familia” no es una cuestión meramente sanguínea, que por el hecho de ser familiar del profeta tengo una bendición sino que de la familia del profeta aludimos especialmente a algunos que fueron nombrados por el profeta, que son nombrados en El Corán y en la explicación de las leyes del Corán y que es una orden tanto en la oración como en el recuerdo de bendecir a ellos porque ellos son la continuidad del profeta y ahí van a venir los hijos, nietos, bisnietos, etcétera, que van a ser los herederos espirituales del profeta y los encargados de guiar y enseñar el Islam, por eso es que nosotros bendecimos especialmente a la familia del profeta y quiénes son esa familia en especial al hija Fátima, Hassam, Hussain y vamos a ver después que los musulmanes sabemos que la familia del profeta (...) se les conoce a ellos, es decir, específicamente a unos familiares, no todos los familiares necesariamente, sino aquellos que han sido creyentes y que nos ha sido ordenado por Dios el obedecerlos, al tomarlos como guías y que son aquellos que suceden, que están más cerca del profeta y que suceden al profeta

 

            Aclarado esto continuamos nosotros viendo el tema de la recitación del Sagrado Corán, las recomendaciones de la recitación. Hay una cuestión que nosotros estamos viendo en la sura Al Waqia, la sura El acontecimiento 56 Sagrado Corán y en ésta sura dijimos que trata a toda ella del maha, de la Resurrección o de la vuelta a Dios y esta vez el Juicio. Cuando estamos en el vientre de la madre nosotros como bebés nos vamos desarrollando, nacemos, hasta ahí no tenemos nada de libre albedrío, es decir, no podemos hacer más que lo estipulado en el planificador, en el Creador Dios, pero poco a poco vamos a ir desarrollando en la medida que crece nuestro intelecto, nuestra responsabilidad, quiere decir nuestra libertad, nuestra capacidad de elegir entre distintos caminos y de ser responsable de la elección que hacemos a medida que se desarrolla el intelecto, algunos dicen a los 40 años llega a su plenitud el intelecto humano, depende eso por supuesto de factores culturales y demás, pero digamos una persona bien educada, bien desarrollada llega a su plenitud digamos a los 40, después se mantiene, después puede seguir creciendo pero con todo su vigor y todo el vigor físico y demás es a los 40; por supuesto la sabiduría como dijimos, pero después el cuerpo en la medida que empieza a fallar, envejecer, etcétera, va afectando las capacidades de entendimiento y demás, si bien no va afectando el espíritu si una persona -por ejemplo- enferma, una persona anciana que se olvida todo, un sabio, un gran sabio se olvida de todo y ahora es como un niño ¿El espíritu de esa persona cómo queda, cómo está?, el espíritu de esa persona está afectado, el alma está afectada por su enfermedad, pero cuando muere esa alma, ese espíritu, se desprende del cuerpo y queda en su realidad de pureza y demás eso por otra parte, no vamos a entrar ahora a ver eso, pero los hombres más purificados y sabios se mantienen realmente mucho más inmunes a los efectos de la de la vejez. De modo que vamos a ver en general a los profetas que han llegado a edades muy avanzadas que mantienen todas sus ideas y toda su capacidad y así con muchos sabios.

 

            Pero dejemos ese tema por ahora, lo importante es que queremos concentrarnos en las recomendaciones de la lectura del Corán y una de ellas tiene que ver con lo que nos dice el Sagrado Corán cuando se dirige a los versículos que tienen que ver con la Resurrección en el Día del Juicio, el cómputo, el Paraíso, el Infierno, a los creyentes, a los hipócritas, a los incrédulos, nosotros tenemos que tener en cuenta cuando leemos El Corán que este nos está hablando nosotros, que nos está guiando, que nos está enseñando, de modo que los versículos que tienen que ver con el Juicio Final, nos dicen los hadices, lo que son las amonestaciones con el Infierno o las albricias del Paraíso, las recomendaciones para alcanzar uno, para evitar el otro y que realmente las veamos en relación a nosotros no a otros, quiere decir que el Juicio Final es para los musulmanes, los creyentes, ¿en qué sentido? ¿no es para toda la humanidad? Sí es para toda la humanidad pero las aleyas y las recomendaciones nos hablan a nosotros que hemos creído en esto, que creemos que es una Revelación y por lo tanto nosotros somos interlocutores de Dios y estos versículos nos hablan directamente a nosotros, mientras que una persona que no cree, que nunca vio El Corán, que no sabe, que ignora, El Corán no le está hablando directamente, sí en modo general está hablando porque la Revelación es para toda la humanidad pero no entró en comunicación, en cambio nosotros entramos en comunicación, realmente estas aleyas son para nosotros, dicen que el Imán (...) el octavo Imán o descendiente de la casa profética, decía cuando leía una aleya (...) quiere decir “aquí estoy, Dios, estoy sometido a ti, estoy a tu servicio” o sea, se sentía identificado y (...) o “vosotros qué creéis”, a mí me está hablando, yo soy de los que creo.

 

            Por lo tanto decía (...) como dije “aquí estoy”, o cuando dice -por ejemplo- “agradeced”, dice “Shukram”, gracias, cuando dice “adorad”, cuando dice por ejemplo “glorificad” (...)  glorificación a Dios (...) quiere decir la glorificación en español o (...) en árabe, quiere decir que el glorificado es (y así lo reconozco) perfección absoluta, glorificado es alguien que tiene toda la gloria, toda la perfección, no tiene defectos, no tiene límites. (...) o cuando dice “recordad, recordemos”, cuando dice “no hagáis esto”, no lo hagamos, o sea, realmente que nos convirtamos o cuando dice “implorad”, imploremos, hablemos con Dios. Esta es otra recomendación, el Imán (...) me parece un viaje, y va con alguien y en un momento de ese viaje le dice “¿tienes un Corán?”, le dice el Imán a la otra persona, dice sí, lee El Corán, quiero escucharlo, la persona empezó a leer y el Imán  tenía esta actitud de decir por ejemplo (...) aquellos que agradecen a Dios (...) y el Imán le dijo (...) observad vuestros corazones, con la recitación del Corán meditad en vuestra situación, dónde estamos en relación a Dios, dónde estamos en relación al agradecimiento de Dios, a la glorificación de Dios, al recuerdo de Dios, a la obediencia a Dios, al temor a Dios, recuerda, o sea, vivifica tu corazón que la distracción lo mata, la distracción lo mata y de repente ocurre un accidente, ocurre una muerte, algo y uno dice “Ahhh”.

 

            Recuerda el poder de Dios, la muerte es una manifestación del poder de Dios. Nosotros creemos que todo va a seguir igual, que siempre nos vamos a despertar, que el que está al lado nuestro se va a despertar con nosotros, que mañana vendrá, que pasado estaremos, que la semana que viene nos vemos, pero de repente irrumpe la muerte y es una manifestación del poder de Dios y es una toma de conciencia de que somos limitados, que no tenemos el timón, somos siervos, esa es nuestra condición (...) “oh seres humanos, vosotros sois pobres necesitados” (...)ciertamente vosotros sois pobres, hombres, seres humanos todos, desde el rey hasta el presidente, hasta el último de los pobres, el pobre es pobre en su pobreza, el rico es pobre en su riqueza, el Imán (...) en su súplica dice “siendo pobre en la riqueza cómo no voy a ser pobre en la pobreza”, todos somos pobres, aquí no se trata de tener plata ¿de qué sirve la plata?, yo me enfermo, soy multimillonario, tengo un país -es mío- y si me enfermo qué hago, si caigo en terapia intensiva qué hago, si me muero qué hago, si muere un hijo ¿qué hago?, ¿qué hago con toda la plata? ¿la puedo dar y que me lo devuelvan? No me lo devuelven.

 

             Una de las manifestaciones del poder de Dios, que Dios le dice a aquellos que niegan el Juicio Final y aquellos que niegan a Dios en el momento de morir, los ángeles toman el alma, el hombre siente que su alma se va, que se le va por el orificio, el alma es retirada de los pies hasta la cabeza y una persona moribunda siente que el halo vital, o el alma, se va, va a morir, se está yendo el alma, siente que se le va, que los pies quedan dormidos, que los pies quedan muertos, que sube su alma y se va por la boca y ahí cuando siente eso, cuando siente que está muriendo, que llegó a su final, que no hay retorno, dice “ahora niega”, “ahora, tú que negabas y ahora niega, vuelve si puedes, si eres autosuficiente como tú creías, si eras rico, si decías el hombre es la medida de todas las cosas”; por ejemplo hoy en día en la democracia, o llamada democracia, qué se dice, “el hombre es la medida de todas las cosas”, si la mayoría dice que esto está bien es ley, si la mayoría dice que eso que estaba bien ahora está mal, está prohibido, ¿quién dicta la ley? el hombre, ¿eso qué quiere decir? que el hombre tiene la sabiduría y la capacidad por sí mismo, independientemente de la trascendencia y de la revelación de Dios, de fijarse a sí mismo su propio destino y su propia forma de vivir, independiente de todo, porque el hombre es capaz con su razón de conocerlo todo. Esto es un pensamiento que se creó en Europa con la modernidad, con la ilustración, con el renacimiento, con el humanismo y hemos llegado a un punto de crisis y de abismo, que es visible ahora, la desesperación de que no hemos evitado las guerras, no hemos evitado la pobreza, no hemos evitado la destrucción del medio ambiente, no hemos evitado la destrucción de la familia, no hemos evitado la corrupción y estamos todos conscientes de que (y nos avisan los científicos, nos avisan los ambientalistas, nos avisan los sociólogos, nos avisan los economistas, los políticos) estamos rumbo a un precipicio si seguimos así.

 

            De modo que el hombre no se basta a sí mismo, Dios le dice al alma que está siendo retirada “vuelve ahora, tú que negabas, ¿no eras tú el señor? Tu condición es ser siervo, es ser dependiente, es ser pobre, es ser necesitado y yo soy el Señor y soy el único Señor”, dice Dios, “pero tú te olvidaste de mí, me negaste a pesar de que respirabas con mi aire, veías con mi luz, usufructuabas la visión con el ojo que te dí, comías con los dientes y con la lengua y con el esófago y con el estómago que yo te di y todo lo hacías con lo que yo te di y era evidente que yo te lo di porque tú no lo habías creado, era evidente, pero estabas dormido, estabas distraído, (...) “Volved y cuidad, observad vuestros corazones con la recitación del Corán y la meditación. Combatid la distracción, el polvo”, la distracción es a veces simbolizada con el polvo que se va acumulando hasta que llega un monte que tapa todo, o el óxido, como habíamos dicho anteriormente, o la podredumbre, etcétera.

 

            La distracción es peligrosa y el recuerdo, por ejemplo dice un dicho profético que “meditar en la muerte es adoración”, vas a morir, no vas a estar siempre aquí, no vas a tener la oportunidad de hacer el bien, de conocer a Dios, de agradecer a Dios, no estés distraído. Este viaje es un lugar de viaje, no es una morada estable el mundo, no es para fijar campamento aquí, como decir por acá me planto, acá echo raíz y toda mi preocupación es cómo tener una casa más grande, cómo tener un auto más grande, cómo tener hijos más surtidos de riqueza, cómo tener más poder, a cualquier costo, no importa, lo importante es que este mundo es pasajero y vas irremediablemente hacia otro mundo, así que cuidado, (...) “te pido a Dios una seguridad, una fe, que albricie con ella a mi corazón”.

 

            Estas son todas las recomendaciones para despertar, para preocuparse por uno mismo, cosa que la cultura hoy en día quizás nos aleja de nosotros mismos y de las cosas más importantes. Decir  (...) “recuerdo permanente de Dios”, (...) dice “Dios fijó en sus corazones la Fe de los seres humanos”, es decir, esta Fe es innata pero lo innato debe ser alimentado, si no lo innato como tal si no es alimentado, muere, como una planta que no se riega, tiene todas las condiciones pero si no se la riega, si no se la cuida, si no se la atiende, sino se la cuida del sol, de la sombra, de la luz, de la oscuridad, o de los animales, lo que fuera, se puede destruir.

 

            Vamos a comenzar –si Dios quiere- con él bismillah (...), aquí empieza la exégesis propiamente, (...) una introducción del libro de Abdul Hussain (...) esto que decimos Abdul Hussain para los que saben árabe saben que decir Abdul significa siervo y quiere decir “adorador”, cuando decimos Abdul como “adorador” es solamente de Dios, Abdulláh, no se puede ser (...) aquí el adorador de uno de los atributos divinos o de Dios, únicamente Dios es el adorado (...) no hay adorado sino Dios, pero cuando decimos Abdul Hussain aquí es en el sentido de sirviente, una persona que sirve, servid a un profeta, dice El Corán, auxiliad a los profetas, servidlos, entonces eso es una bendición, este Ab es en ese sentido, no se confundan algunos que creen que aquellos que se llaman Abdul Hussain son idólatras porque adoran a Hussain o a (...), lo que fuera.

 

            Muy bien, si Dios quiere, entonces comenzamos en la próxima entrega o en la próxima charla con el bismillah rahman rahim y su exégesis.

 

 

(Despedida en Árabe)

 

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Purificación necesaria para beneficiarse del Sagrado Corán

Descripción

Transcripción

Analizamos las recomendaciones del Imam Rida, el octavo Imam sobre la necesidad de cuidar nuestro corazón o alma. No distraernos del recuerdo sincero de Dios. No podemos negar el Poder de Dios.

(Saludo en Árabe)

 

            En el nombre de Dios, el clementísimo, el misericordiosísimo, la bendición y la paz sean con Muhammad y su familia purificada y con todos los profetas especialmente con Jesús y Muhammad.

 

            ¿Por qué decimos las bendiciones sean sobre el profeta y su familia purificada? Porque tenemos tradiciones del profeta y tenemos versículos que hablan del lugar especial que la familia del profeta tiene vinculada al profeta, no es por el solo hecho de que uno menciona a alguien y dice bueno y su familia, en la familia del profeta hubo enemigos del profeta, Abu Lahab era tío del profeta y fue enemigo maldito en el Corán, se enfrentó contra él, lo atacó, intentó todo tipo de maniobras para impedir su misión, era uno de los líderes de la oposición al profeta y era su familia.

 

            Entonces cuando decimos “la bendición sea para él y su familia” no es una cuestión meramente sanguínea, que por el hecho de ser familiar del profeta tengo una bendición sino que de la familia del profeta aludimos especialmente a algunos que fueron nombrados por el profeta, que son nombrados en El Corán y en la explicación de las leyes del Corán y que es una orden tanto en la oración como en el recuerdo de bendecir a ellos porque ellos son la continuidad del profeta y ahí van a venir los hijos, nietos, bisnietos, etcétera, que van a ser los herederos espirituales del profeta y los encargados de guiar y enseñar el Islam, por eso es que nosotros bendecimos especialmente a la familia del profeta y quiénes son esa familia en especial al hija Fátima, Hassam, Hussain y vamos a ver después que los musulmanes sabemos que la familia del profeta (...) se les conoce a ellos, es decir, específicamente a unos familiares, no todos los familiares necesariamente, sino aquellos que han sido creyentes y que nos ha sido ordenado por Dios el obedecerlos, al tomarlos como guías y que son aquellos que suceden, que están más cerca del profeta y que suceden al profeta

 

            Aclarado esto continuamos nosotros viendo el tema de la recitación del Sagrado Corán, las recomendaciones de la recitación. Hay una cuestión que nosotros estamos viendo en la sura Al Waqia, la sura El acontecimiento 56 Sagrado Corán y en ésta sura dijimos que trata a toda ella del maha, de la Resurrección o de la vuelta a Dios y esta vez el Juicio. Cuando estamos en el vientre de la madre nosotros como bebés nos vamos desarrollando, nacemos, hasta ahí no tenemos nada de libre albedrío, es decir, no podemos hacer más que lo estipulado en el planificador, en el Creador Dios, pero poco a poco vamos a ir desarrollando en la medida que crece nuestro intelecto, nuestra responsabilidad, quiere decir nuestra libertad, nuestra capacidad de elegir entre distintos caminos y de ser responsable de la elección que hacemos a medida que se desarrolla el intelecto, algunos dicen a los 40 años llega a su plenitud el intelecto humano, depende eso por supuesto de factores culturales y demás, pero digamos una persona bien educada, bien desarrollada llega a su plenitud digamos a los 40, después se mantiene, después puede seguir creciendo pero con todo su vigor y todo el vigor físico y demás es a los 40; por supuesto la sabiduría como dijimos, pero después el cuerpo en la medida que empieza a fallar, envejecer, etcétera, va afectando las capacidades de entendimiento y demás, si bien no va afectando el espíritu si una persona -por ejemplo- enferma, una persona anciana que se olvida todo, un sabio, un gran sabio se olvida de todo y ahora es como un niño ¿El espíritu de esa persona cómo queda, cómo está?, el espíritu de esa persona está afectado, el alma está afectada por su enfermedad, pero cuando muere esa alma, ese espíritu, se desprende del cuerpo y queda en su realidad de pureza y demás eso por otra parte, no vamos a entrar ahora a ver eso, pero los hombres más purificados y sabios se mantienen realmente mucho más inmunes a los efectos de la de la vejez. De modo que vamos a ver en general a los profetas que han llegado a edades muy avanzadas que mantienen todas sus ideas y toda su capacidad y así con muchos sabios.

 

            Pero dejemos ese tema por ahora, lo importante es que queremos concentrarnos en las recomendaciones de la lectura del Corán y una de ellas tiene que ver con lo que nos dice el Sagrado Corán cuando se dirige a los versículos que tienen que ver con la Resurrección en el Día del Juicio, el cómputo, el Paraíso, el Infierno, a los creyentes, a los hipócritas, a los incrédulos, nosotros tenemos que tener en cuenta cuando leemos El Corán que este nos está hablando nosotros, que nos está guiando, que nos está enseñando, de modo que los versículos que tienen que ver con el Juicio Final, nos dicen los hadices, lo que son las amonestaciones con el Infierno o las albricias del Paraíso, las recomendaciones para alcanzar uno, para evitar el otro y que realmente las veamos en relación a nosotros no a otros, quiere decir que el Juicio Final es para los musulmanes, los creyentes, ¿en qué sentido? ¿no es para toda la humanidad? Sí es para toda la humanidad pero las aleyas y las recomendaciones nos hablan a nosotros que hemos creído en esto, que creemos que es una Revelación y por lo tanto nosotros somos interlocutores de Dios y estos versículos nos hablan directamente a nosotros, mientras que una persona que no cree, que nunca vio El Corán, que no sabe, que ignora, El Corán no le está hablando directamente, sí en modo general está hablando porque la Revelación es para toda la humanidad pero no entró en comunicación, en cambio nosotros entramos en comunicación, realmente estas aleyas son para nosotros, dicen que el Imán (...) el octavo Imán o descendiente de la casa profética, decía cuando leía una aleya (...) quiere decir “aquí estoy, Dios, estoy sometido a ti, estoy a tu servicio” o sea, se sentía identificado y (...) o “vosotros qué creéis”, a mí me está hablando, yo soy de los que creo.

 

            Por lo tanto decía (...) como dije “aquí estoy”, o cuando dice -por ejemplo- “agradeced”, dice “Shukram”, gracias, cuando dice “adorad”, cuando dice por ejemplo “glorificad” (...)  glorificación a Dios (...) quiere decir la glorificación en español o (...) en árabe, quiere decir que el glorificado es (y así lo reconozco) perfección absoluta, glorificado es alguien que tiene toda la gloria, toda la perfección, no tiene defectos, no tiene límites. (...) o cuando dice “recordad, recordemos”, cuando dice “no hagáis esto”, no lo hagamos, o sea, realmente que nos convirtamos o cuando dice “implorad”, imploremos, hablemos con Dios. Esta es otra recomendación, el Imán (...) me parece un viaje, y va con alguien y en un momento de ese viaje le dice “¿tienes un Corán?”, le dice el Imán a la otra persona, dice sí, lee El Corán, quiero escucharlo, la persona empezó a leer y el Imán  tenía esta actitud de decir por ejemplo (...) aquellos que agradecen a Dios (...) y el Imán le dijo (...) observad vuestros corazones, con la recitación del Corán meditad en vuestra situación, dónde estamos en relación a Dios, dónde estamos en relación al agradecimiento de Dios, a la glorificación de Dios, al recuerdo de Dios, a la obediencia a Dios, al temor a Dios, recuerda, o sea, vivifica tu corazón que la distracción lo mata, la distracción lo mata y de repente ocurre un accidente, ocurre una muerte, algo y uno dice “Ahhh”.

 

            Recuerda el poder de Dios, la muerte es una manifestación del poder de Dios. Nosotros creemos que todo va a seguir igual, que siempre nos vamos a despertar, que el que está al lado nuestro se va a despertar con nosotros, que mañana vendrá, que pasado estaremos, que la semana que viene nos vemos, pero de repente irrumpe la muerte y es una manifestación del poder de Dios y es una toma de conciencia de que somos limitados, que no tenemos el timón, somos siervos, esa es nuestra condición (...) “oh seres humanos, vosotros sois pobres necesitados” (...)ciertamente vosotros sois pobres, hombres, seres humanos todos, desde el rey hasta el presidente, hasta el último de los pobres, el pobre es pobre en su pobreza, el rico es pobre en su riqueza, el Imán (...) en su súplica dice “siendo pobre en la riqueza cómo no voy a ser pobre en la pobreza”, todos somos pobres, aquí no se trata de tener plata ¿de qué sirve la plata?, yo me enfermo, soy multimillonario, tengo un país -es mío- y si me enfermo qué hago, si caigo en terapia intensiva qué hago, si me muero qué hago, si muere un hijo ¿qué hago?, ¿qué hago con toda la plata? ¿la puedo dar y que me lo devuelvan? No me lo devuelven.

 

             Una de las manifestaciones del poder de Dios, que Dios le dice a aquellos que niegan el Juicio Final y aquellos que niegan a Dios en el momento de morir, los ángeles toman el alma, el hombre siente que su alma se va, que se le va por el orificio, el alma es retirada de los pies hasta la cabeza y una persona moribunda siente que el halo vital, o el alma, se va, va a morir, se está yendo el alma, siente que se le va, que los pies quedan dormidos, que los pies quedan muertos, que sube su alma y se va por la boca y ahí cuando siente eso, cuando siente que está muriendo, que llegó a su final, que no hay retorno, dice “ahora niega”, “ahora, tú que negabas y ahora niega, vuelve si puedes, si eres autosuficiente como tú creías, si eras rico, si decías el hombre es la medida de todas las cosas”; por ejemplo hoy en día en la democracia, o llamada democracia, qué se dice, “el hombre es la medida de todas las cosas”, si la mayoría dice que esto está bien es ley, si la mayoría dice que eso que estaba bien ahora está mal, está prohibido, ¿quién dicta la ley? el hombre, ¿eso qué quiere decir? que el hombre tiene la sabiduría y la capacidad por sí mismo, independientemente de la trascendencia y de la revelación de Dios, de fijarse a sí mismo su propio destino y su propia forma de vivir, independiente de todo, porque el hombre es capaz con su razón de conocerlo todo. Esto es un pensamiento que se creó en Europa con la modernidad, con la ilustración, con el renacimiento, con el humanismo y hemos llegado a un punto de crisis y de abismo, que es visible ahora, la desesperación de que no hemos evitado las guerras, no hemos evitado la pobreza, no hemos evitado la destrucción del medio ambiente, no hemos evitado la destrucción de la familia, no hemos evitado la corrupción y estamos todos conscientes de que (y nos avisan los científicos, nos avisan los ambientalistas, nos avisan los sociólogos, nos avisan los economistas, los políticos) estamos rumbo a un precipicio si seguimos así.

 

            De modo que el hombre no se basta a sí mismo, Dios le dice al alma que está siendo retirada “vuelve ahora, tú que negabas, ¿no eras tú el señor? Tu condición es ser siervo, es ser dependiente, es ser pobre, es ser necesitado y yo soy el Señor y soy el único Señor”, dice Dios, “pero tú te olvidaste de mí, me negaste a pesar de que respirabas con mi aire, veías con mi luz, usufructuabas la visión con el ojo que te dí, comías con los dientes y con la lengua y con el esófago y con el estómago que yo te di y todo lo hacías con lo que yo te di y era evidente que yo te lo di porque tú no lo habías creado, era evidente, pero estabas dormido, estabas distraído, (...) “Volved y cuidad, observad vuestros corazones con la recitación del Corán y la meditación. Combatid la distracción, el polvo”, la distracción es a veces simbolizada con el polvo que se va acumulando hasta que llega un monte que tapa todo, o el óxido, como habíamos dicho anteriormente, o la podredumbre, etcétera.

 

            La distracción es peligrosa y el recuerdo, por ejemplo dice un dicho profético que “meditar en la muerte es adoración”, vas a morir, no vas a estar siempre aquí, no vas a tener la oportunidad de hacer el bien, de conocer a Dios, de agradecer a Dios, no estés distraído. Este viaje es un lugar de viaje, no es una morada estable el mundo, no es para fijar campamento aquí, como decir por acá me planto, acá echo raíz y toda mi preocupación es cómo tener una casa más grande, cómo tener un auto más grande, cómo tener hijos más surtidos de riqueza, cómo tener más poder, a cualquier costo, no importa, lo importante es que este mundo es pasajero y vas irremediablemente hacia otro mundo, así que cuidado, (...) “te pido a Dios una seguridad, una fe, que albricie con ella a mi corazón”.

 

            Estas son todas las recomendaciones para despertar, para preocuparse por uno mismo, cosa que la cultura hoy en día quizás nos aleja de nosotros mismos y de las cosas más importantes. Decir  (...) “recuerdo permanente de Dios”, (...) dice “Dios fijó en sus corazones la Fe de los seres humanos”, es decir, esta Fe es innata pero lo innato debe ser alimentado, si no lo innato como tal si no es alimentado, muere, como una planta que no se riega, tiene todas las condiciones pero si no se la riega, si no se la cuida, si no se la atiende, sino se la cuida del sol, de la sombra, de la luz, de la oscuridad, o de los animales, lo que fuera, se puede destruir.

 

            Vamos a comenzar –si Dios quiere- con él bismillah (...), aquí empieza la exégesis propiamente, (...) una introducción del libro de Abdul Hussain (...) esto que decimos Abdul Hussain para los que saben árabe saben que decir Abdul significa siervo y quiere decir “adorador”, cuando decimos Abdul como “adorador” es solamente de Dios, Abdulláh, no se puede ser (...) aquí el adorador de uno de los atributos divinos o de Dios, únicamente Dios es el adorado (...) no hay adorado sino Dios, pero cuando decimos Abdul Hussain aquí es en el sentido de sirviente, una persona que sirve, servid a un profeta, dice El Corán, auxiliad a los profetas, servidlos, entonces eso es una bendición, este Ab es en ese sentido, no se confundan algunos que creen que aquellos que se llaman Abdul Hussain son idólatras porque adoran a Hussain o a (...), lo que fuera.

 

            Muy bien, si Dios quiere, entonces comenzamos en la próxima entrega o en la próxima charla con el bismillah rahman rahim y su exégesis.

 

 

(Despedida en Árabe)

 

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