Hola, gracias por estar una vez más con nosotros. Hoy finalizamos nuestra entrega especial sobre el Martirio del a Imam Ali (as), en su nuevo espacio de “Desayunos espirituales”.

Más que los sufrimientos de Aba Abdillah Al Hussain (La Paz de Dios sea con él), están los sufrimientos del “Comandante de los Creyentes el Imam Ali” (La Paz sea con el).

Muchos de los sufrimientos vividos por el Imam Ali, no pueden ni ser mencionados; solo unos cuantos podrían ver la luz de la realidad y aun así, mucha gente común no los llegarían a entender, gente común como nosotros que no pueden ni así, siendo testigos de ellos, llorar tan solo un poco.

El Imam Ali (as) era poseedor de todos los talentos del mundo, pero a pesar de ello, tuvo que dedicarse a la agricultura durante 25 años de su vida.

Ante esto tan simple, uno debería de llorar amarga y profundamente, con tan solo el hecho de escuchar que día a día, este hombre de dimensiones tan profundas y con tal conocimiento, estuviese por tanto tiempo cavando la tierra.

Uno llega a veces a maldecir los tiempos en los que las gentes dieron por completo la espalda a Amir Al Muminin (as) y le dejaron solo, completamente solo.

Tan solo imaginemos que el ¡Universo entero estaba a su servicio! El mismo Imam estaba molesto y sorprendido por la actitud que las gentes habían tomado hacia él y solía decir:

“Pregúntenme ante de que me vaya de entre ustedes”.

Algunas de las elegías del Imam Ali no pueden ser descritas de verdad y con certeza repito que si las escuchásemos con detenimiento, siendo descritas con lujo de detalle, no nos harían a nosotros personas comunes, llorar.

Un ejemplo es un hombre que una vez le reclamó al Imam (as) lo siguiente:

“¡Oh Ali! ¿Por qué nos respondes sin pensar tan siquiera un poco en la respuesta, cuando te formulamos una pregunta? Tan solo reflexiona un poco.”

Esto en verdad era algo que no podría haber tolerado.

Pero igualmente el Imam Ali (as) le respondió:

“¿Acaso cuando alguien se te acerca y pregunta tu nombre, te detendrías tan solo un segundo para pensar en la respuesta antes de darla? Y el hombre dijo de inmediato: “Por su puesto que no, no es necesario pensar en esta situación.”

A lo que el Imam dijo:

“¿Qué puedo hacer? Estas cosas que me estás preguntando y muchísimas otras cosas similares a esta, son obvias para mí, de la forma en la que es tu nombre si se te fuese preguntado.”

Mira el grado de la soledad en la que se encontraba el Imam Ali (as) en referencia al apoyo o del trato recibido.

Yo con mi poco y limitado conocimiento cuando estudio la vida del Imam Ali (as), se me es muy difícil tolerar el ver como era tratado el Imam (as) no soy capaz de imaginar el dolor y el sentimiento de soledad y traición que el Imam podría haber estado experimentando a lo largo de todo ese tiempo.

Una vez alguien le preguntó al Imam As Sadiq (as):

“Cual visita (al santuario y tumba) es más importante y tiene mayor recompensa; la del Imam Ali o la del Imam Hussain (as)?”

La mayoría de las recomendaciones, se refieren al hecho de visitar la tumba del Imam Hussain (as) en Karbala, ante lo que de nuevo se le pregunto al Imam As Sadiq (as):

¿Cuánta recompensa tiene el visitar al santuario del Imam Ali? ¿Acaso eso tiene más recompensa?

A lo que el Imam As Sadiq (as) dijo: “Tiene más recompensa la visita a la tumba del Imam Ali (as) en la misma cantidad que la superioridad de Ali Ibn Abi Talib en comparación con el Imam Al Hussain (as).”

Algunos de nosotros podemos entonces preguntarnos sobre la razón de ¿Por qué entonces se hace más mención y énfasis en el visitar la tumba del Imam Hussain (as)?

Y la razón es que el Imam Hussain (as) y todo lo acontecido en Karbala, especialmente por su condición y cadena de hecho en un tan corto periodo de tiempo y lo épico de dicha epopeya, es que suele existir una mayor capacidad de influencia en nosotros por parte del Imam Hussain y la historia de Karbala, de lo contrario ser influenciado por el Imam Ali (as) trae más recompensa.

De hecho que visitar al Imam Ali (La Paz de Dios sea sobre el) trae más recompensa y trae más luz. Pero no podemos alcanzar ese nivel. Por lo general, nos influimos más fácilmente cuando escuchamos los lamentos por lo ocurrido en Karbala, y nos enfocamos en prestar atención a la luz que de esa atención por la epopeya de Hussain, brilla en nuestro corazón.

El Imam Ali (as) tenía razón al contar lo que en sueño había visto. Sobre esto el Imam narra su sueño así:

“Vi en un sueño al Profeta del Islam a quien le decía: “Oh Mensajero de Dios, estoy cansado de esta nación.” A lo que el Profeta Muhammad (La Paz de Dios sea sobre él y su familia) respondió: “Mi amado Ali, tan solo maldícelos.” Y el Imam cuenta: Levanté mis manos y les maldije así: “Oh Dios, aleja a Ali de esta gente.” Y fue de inmediato que tanto la tierra como los cielos temblaban y el mismo trono Divino, también se estremeció y de inmediato un heraldo gritó y todos le prestaron atención, ya que decía: “Mawla (nuestro Guardián) ha sido asesinado.”

¿Acaso no debemos reflexionar sobre eso? ¿No deberíamos acaso entonces estremecernos por esta gran y profunda tragedia?

La voz de la justicia y de lo Divino tuvo que ser arrancado de la tierra, despojando a sus seguidores de la fuente de vida que tenía el Imam en sus manos, sobre todo por el grado de conocimiento y sabiduría sin olvidar de la espiritualidad que Ali representaba.

El Imam Ali (as) tan solo nos dejó un legado puro, pero imaginemos entonces tan solo, el grado de perfección en la que viviríamos ahora, sin tan solo hubiese habido gente real que le siguiera y le hayan preguntado algo de valor, cuando dijo: Pregunta Pregunta.