En el nombre de Dios, hola, soy Mahdi y este mensaje es traído a ustedes por FátimaTV.

Antes de dar inicio con este especial, quiero invitarles a seguirnos en nuestras redes sociales, especialmente en Youtube desde donde transmitimos semana a semana saberes que iluminan el alma. El apoyo que nos den con seguirnos en esta plataforma es de gran ayuda para continuar con esta labor que nos enorgullece y sabemos es de utilidad para así lograr el enriquecimiento de conocimiento y espiritualidad.

Así que suscríbanse si aún no lo han hecho, denle like a nuestros videos y activen las notificaciones para no perderse de ningún contenido.

Hoy es un día especial, es el día en que honramos a quien fuese al puerta a la ciudad del conocimiento, aquel que no tuvo par entre quienes viviesen en su época, aquel que salvase de la aniquilación a quien luego fuese el verdugo de lo que más amaba, hoy es el día en que le honramos y recordamos nuestro compromiso y fidelidad, hoy es el Eid Al Ghadir y brevemente quiero explicar que es lo que nuestros corazones encierran por quien fuese el más cercano y amado por el Profeta Muhammad (La Paz de Dios sea con él y su familia)

………

Si algo compartimos, aquellos quienes amamos a quienes están debajo del manto yemení, es ese orgullo que sentimos cada vez que se nos recuerda a estos inmaculados. Es único ese sentimiento que florece tal como un sentimiento cálido de mucho valor, positivo e impregnado de gratitud.

En el fondo todos sabemos que no somos dignos de que nuestro pecho reboce con tal sentimiento, al ser débiles en nuestro deber para con Dios y para con quienes fuese el Zaqalain. Pero la calidez en el corazón, ese orgullo que sentimos cuando escuchamos su nombre y lo proclamamos como nuestro, un nombre grande para un gran hombre, el nombre de aquel quien en verdad fuese el primero y no el cuarto del Islam.

Nosotros, sus seguidores y amantes, nos enorgullecemos cuando personas como el Dr. Henry Stubbe, lo describen como el justo en todas sus acciones, o cuando Gerald de Guary habla acerca de cuan valiente era en la batalla, fiel a sus amigos y magnánimos con quienes le combatían.

O cuando Wilfred Madelung, elogió la generosidad que mostró a sus enemigos derrotados, o cuando Charles Mills, lo describe como el Aarón para un segundo Moisés. La lista de quienes si lograron ver su resplandeciente luz y valor, a pesar de no ser musulmanes, es innumerable, por ejemplo Thomas Carlyle, Edwar Gibbon, Sir William Muir, Simon Ockley, Washington Irving, George Jordac y muchos otros más, y es ahí cuando apesumbrado mi corazón se pregunta; ¿cómo es que tantos no lograron ver la puerta de la ciudad, de la más grande ciudad?

¿Cómo es que extrañaron a quien levantase la puerta de Khaibar? Ese que dejo esa puerta abierta a todos, el que dio caridad mientras se inclinaba en adoración, el que se alejó de Marhab, el que durmiese en la cama del Profeta de Islam, quien fuese su más amado, en virtud de salvarle del acecho de la maldad, el que nunca escapó, el que aconsejó a sus enemigos con la guía al bien, aquel conocido como la Cima de la Elocuencia, el campeón de Badr, Uhud, Khanduk y Hunain, aquel en medio del anonimato de la noche, alimentaba a los pobres, el padre de los dos señores de los jóvenes del paraíso y quienes fuesen los más amados por Rasul, a quien rogaban a que dirigiera, el punto debajo de la letra Ba, el Nabail Adhim, el único nacido dentro de la Kaaba.

Si esto no te es suficiente para entender quien es aquel por el cual nuestro corazón se desborda de amor y orgullo, entonces les invito a ver el Capítulo 2 versículo 207 del Corán o el Capítulo 7, versículo 81 o 20:82, por que no el 58:12 o 13:43 o prueba con el 66:4, 3:6, 3:61, 4:54, 4:83, 76:8, 42:23, 5:3, 5:54, 5:55, 33:33  ¿cómo es que no pueden ver? ¿Cuan ciego se es o cuan poco importa la verdad?

“¡Oh Mensajero! Proclama lo que te fue revelado por tu Señor, porque si no lo hicieras no habrás comunicado Su Mensaje, y Dios te mantendrá a salvo de la gente». Hoy, os He perfeccionado vuestra religión, He completado Mis gracias para con vosotros y Me satisface para vosotros el Islam por religión»”

¿De quién son estos vesículos? 1400 años nos separan, pero él es para siempre nuestro orgullo y nuestro honor, a él lo reclamamos como nuestro y nos matan por ello, pero aún así permanecemos de pie, con el corazón latiendo y la frente arriba llena de orgullo.

Cuando lo abrazamos con la lógica y la racionalidad, pronto se desvanecen aquellos quienes nos señalan, exagerados y locos a menudo algunos nos etiqueta, pero bebe tan solo un poco de su fuente y prueba su dulzor por ti mismo y tal como él le dijo a su compañero Kumail: “!Oh Kumail, lo que se rocía sobre ti, fluye abundante dentro de mí!”

El es Nafse Rasul, Amir Al Muminin, Imamul Muttaqin, Maz-har Al Ajaaib, Asadullah il Ghalib, Maulana Ali Ibn Abi Talib, el es HAIDAR tal como lo nombró su madre.

La mayoría de nosotros sabemos que no somos dignos de esto, pero el sigue y seguirá siendo nuestro ¡maulana y nuestra Gloria!

Corte y vuelve a entrar.

Dijo el mensajero de Dios respecto al Imam Ali: “Si los bosques se convirtieran en cálamos, los mares en tinta, los genios en calculadores y los humanos en escribas, aún así; no podrían enumerar las virtudes de Ali Ibn Abi Talib”

¡Sabed! Quienes sientan cariño hacia Ali en verdad nos aman y quienes nos aman, Dios está complacido con ellos. Y con quienes Dios está complacido, su recompensa es el Paraíso…¡Sabed! Quienes ama a Ali, sus oraciones y rezos son aceptados y sus súplicas contestadas y los ángeles piden perdón por ellos y las siete puertas del paraíso se abren para esta gente.”

Para despedirme dejé de último para mención de entre quienes exaltaron al Imam Ali sin ser de entre los musulmanes, al maravilloso escritor y poeta Khalil Gibrán, Libanés de raíces cristianas, quien luego de estudiar la vida del Imam Ali dijo lo siguiente:

“En mi opinión Ali, fue el primer árabe en tener contacto y conversar con el alma universal. Murió mientras la oración estaba en sus dos labios. Los árabes no conocieron de su valor hasta que aparecieron entre ellos sus vecinos persas, quienes conocían la diferencia entre las gemas y la grava.”

De nuevo no me despido sin antes agradecer su atención, ruego a Dios, Todo poderoso, les guíe y les otorgue lo mejor de esta y la otra vida a cada uno de ustedes y sus seres amados.

Recuerden suscribirse a nuestro canal en youtube, darle like a nuestros videos y compartirlos y muy importante dejen en los comentarios su retroalimentación para así poder trabajar en esos temas que más les interese.

Hasta pronto, si Dios así lo desea.