En el nombre de Dios, el Clemente el Misericordioso,
la paz de Dios sea con todos sus Profetas
desde Adán hasta Muhammad (s)

Nuevamente estamos para hablar de la necesidad de la religión. Uno podría preguntarse ¿cuál es la razón de que los religiosos siguen una religión o si se sienten obligados a obedecer a Dios o a seguir un camino de espiritualidad y práctica, de creencia? o preguntarse ¿por qué necesitamos de la religión, y por qué nosotros los creyentes opinamos que aquél que no tiene religión, en realidad, no está cumpliendo con una necesidad básica humana? Es decir creemos y consideramos que el ser humano por naturaleza tiene una gran necesidad de la religión, o mejor dicho, creemos que la religión es la única que puede responder a ciertas necesidades humanas. Si nosotros vemos las narraciones del Profeta y de Ahlul Bayt (a.s), las aleyas coránicas y la enseñanzas del Islam, nos damos cuenta que el Islam propone varias cuestiones para la respuesta a ¿por qué necesitamos de la religión? y ¿cuál es la necesidad de la religión?

Nosotros creemos que el primer punto tiene que ver con una cuestión de comprensión. El ser humano cuando nace, nace ignorándolo todo y, como ignorante que nace el ser humano, cuando comienza a conocer parte de la realidad —según los filósofos dicen que en el comienzo uno comienza a conocerse a uno mismo, luego comienza a conocer la realidad, comienza a conocer el universo, comienza a conocer a través de los sentidos todo lo que percibe a través de la vista, a través del oído, a través del olfato, del tacto y del gusto— va acumulando una serie de información, y cuanto más se acumula esta información y este conocimiento va creciendo dentro de él, más son las preguntas y los interrogantes y más son las dudas que aparecen en la vida del hombre. ¿Por qué? Porque obviamente uno ignora más de que lo que sabe. Ustedes saben que el conocimiento es un gran océano de información. El ser humano como es limitado solamente tiene posibilidad de poder conocer parte de la realidad. Especialmente en los primeros años de la niñez el hombre simplemente comienza a tener información sobre parte de la realidad y del universo. Con esa parte y al ignorar tantas cosas quedan ciertos vacíos en donde constantemente uno va a requerir mayor información, ciertos vacíos que se transforman en preguntas. Por ejemplo, todas las corrientes de pensamiento siempre hablaron en el sentido de que el hombre ha tenido una ignorancia acerca de su origen y siempre ha querido responder a la pregunta: ¿de dónde venimos? Se sabe muy bien que el hombre muchas veces no sabe cuál es el objetivo de su vida, por qué vive, por qué se encuentra acá, para qué se encuentra en esta dimensión; por ello también tiene necesidad de conocer cuál es la filosofía de su vida y de su existencia acá en la tierra.

Muchos preguntan acerca de cuál es el devenir, de cuál es el futuro del hombre, hacia dónde se va a dirigir el hombre después de la muerte, qué es lo que hay más allá. Por lo tanto hay una serie de interrogantes y de preguntas que quedan muchas veces sin responder, porque el hombre es muy limitado en su conocimiento y generalmente nadie pudo ir a la muerte, ver aquél mundo y regresar para contar a los demás lo que vio; nadie murió y luego resucitó y contó la historia del Más Allá; nadie saber de dónde viene porque no existíamos antes de venir a este mundo, éramos simplemente “nada”. Entonces bajo todas esas limitaciones del ser humano, el hombre ignora muchas cosas y necesita constantemente de poder comprender, poder comprender la realidad suya, la realidad de su origen, la realidad del su vida, la realidad del Más Allá, hacia donde se dirige. Todas estas son cuestiones necesarias para que todo ser humano conozca, y es por eso que la primer necesidad que tenemos ante nuestra propia realidad es de una ideología, de una doctrina, de una religión, de una revelación, de un mensaje divino que venga a dar respuesta justamente a esos interrogantes.

Por eso la primera necesidad que tenemos de la religión, es la necesidad del conocimiento. La religión nos apoya y nos colabora para tener conocimiento sobre aquello que ignoramos. Ustedes saben muy bien que la ignorancia como “vacío existencial” crea una verdadera necesidad, por eso está el sentido de curiosidad en el hombre. Ustedes saben muy bien que innatamente el hombre por necesidad busca el conocimiento, nadie se conforma con ser ignorante. Es por eso que el hombre está constantemente tratando de buscar las respuestas a sus interrogantes.

Por lo tanto como resumen, el Islam y la religión en general, y el Islam en particular nos sirven y los necesitamos para poder quitar ese obstáculo de ignorancia, para poder llenar ese vacío de conocimiento que tenemos en nuestro ser y a través de la religión responder a todas las interrogantes. Estas son dos cosas que se solucionan; en primer lugar el conocimiento se suma en el ser humano, el conocimiento se nos da a través de la religión, a través de una fuente fidedigna y válida.

El segundo punto es que comencemos a comprender por qué una vez que uno tiene conocimiento y uno va llenando los vacíos de ignorancia uno comienza a comprender, y con la comprensión uno puede ir armando su propia visión del mundo, su propia cosmovisión.

Esta fue la primera necesidad que tenemos sobre la religión. En las próximas clases hablaremos de las otras necesidades.

 ALAHAMDU LIL.LAHI RABBIL ‘ALAMIN,
WA SALAM ‘ALIKUM WA RAHMATUL.LAHI WA BARAKATU