El Imam Muhammad Al-Baqir aprovechó la oportunidad de los problemas internos en el Gobierno Omeya para cumplir con una de sus misiones principales, que era la educación, formación y guía de los musulmanes.
La vida urbana nos agobia y provoca que nos olvidemos de la gente amada. Un ramo de flores nos parece la mejor manera de expresar nuestro amor a quien nos ha traído al mundo. Mientras que algunos lamentan haber perdido a sus seres queridos, otros los tienen cerca y no aprovechan la vida para compartir con ellos.