El pan es una bendición maravillosa. Este simple pan ha pasado por etapas extrañas para llegar a nuestras manos. Un agricultor aró la tierra y sembró semillas debajo de la tierra, luego Dios envió lluvia y las semillas germinaron. Después de la atención del agricultor y la protección contra plagas y animales, y la cooperación con los cosechadores, finalmente el grano de trigo está listo para ser cosechado. En resumen, a pesar del trabajo arduo y la ayuda de algunas máquinas, los racimos de trigo se cosechan y los granos se separan de las espigas, y más tarde se han dedicado a molerlos en otro lugar.
Pero esto es sólo la mitad del proceso de producción del pan. La harina debe ser trasladada de nuevo y llegar a manos del panadero. El panadero debe convertirlo en una masa utilizando todos los trucos que sabe, y luego colocarla en un horno o una máquina que él mismo ha preparado con muchos pasos adicionales. Luego esta masa se hornea en forma de pan y se nos entrega.
Sin embargo, algunos de nosotros en la sociedad miramos el pan con desprecio. No consideramos el pan, que nuestra vida, fuerza, vigor y seguridad dependen de él, como una gran y especial bendición. Es decir, las migajas sobrantes de pan, e incluso el pan en sí, no es un producto respetable y valioso. Y este estilo de vida es un proceso peligroso que, si no cambia, podría llevar a una civilización hacia la destrucción.
El Sheij Kulaini en su libro "Al-Kafi" ha narrado un hadiz del Imam Sadiq (P) que dijo:
El Profeta (P) dijo: "Honra el pan, porque desde el Trono hasta la Tierra y muchas de las criaturas que están en la superficie de la Tierra trabajaron en él [para que llegara a nuestras manos y lo comamos] ".
Luego preguntó a aquellos que lo rodeaban: "¿Quieres que les dé una noticia importante?"
Ellos dijeron: "Sí, Oh Mensajero de Dios [hazlo y dinos cuál es esa noticia importante], que nuestros padres y madres se sacrifiquen por ti".
Entonces el Profeta dijo: Ciertamente, entre los que fueron antes de ti, había un profeta que se llamaba Daniel, y [y un día] le dio una hogaza de pan al dueño de un barco en el que iban al otro lado. del río.
Hasta que el dueño de la barca, en lugar de este pan, [ponga a Daniel en la barca y] lo lleve al otro lado del río.
Pero el dueño del [bote o...] tiró el pan y dijo: ¿Qué debo hacer con este pan?! A veces, pisoteamos el pan [y lo ponemos debajo de nuestros pies y no tiene valor!]
Entonces, cuando Daniel vio este acto [y palabra] de él, levantó su mano hacia el cielo y dijo:
¡Oh Dios! ¡Honra el pan! Porque Tú, mi Señor, has visto lo que este siervo ha hecho y ha dicho!
Entonces, Allah envió una revelación al cielo para que retuviera la lluvia de ellos y envió una revelación a la tierra para que se volviera dura y apretada como una vasija cocida (para que no brote ninguna planta de ella). El Profeta Muhammad, que narraba esta historia, dijo: "Así que no llovió sobre ellos, hasta que su situación empeoró tanto que algunos de ellos comieron a otros debido a la sequía y la hambruna".
Un día, una mujer le dijo a otra mujer -ambas tenían un hijo-: "Ven conmigo y hoy comamos a mi hijo, y mañana comemos al tuyo". La otra mujer respondió: "Sí, hagámoslo así".
(Había llegado la sequía y la hambruna a un punto en el que incluso la compasión materna había desaparecido y una madre estaba pensando en comer a su propio hijo.)
Resumen: ambas mujeres comieron al hijo de la primera que hizo la propuesta. Cuando volvieron a tener hambre, la mujer que propuso la idea quería que comieran al hijo de la otra mujer, pero esta se negó y acudió a Daniel para que fuera el juez. Las mujeres le explicaron la situación y Daniel les preguntó si realmente habían llegado a tal punto. Ellas le dijeron que sí y que la situación era aún más grave.
El Mensajero del Islam (el Profeta Muhammad) continuó la historia de la siguiente manera:
Entonces, el profeta Daniel levantó su mano hacia el cielo y dijo: "¡Oh Dios! Vuelve a nosotros tu gracia y misericordia, y no castigues a los niños y aquellos en quienes hay bondad por los pecados de esa persona dueña del barco y otros como él en relación a Tu bendición".
El Profeta Muhammad dijo: Entonces, Dios Todopoderoso dio la orden al cielo de que lloviera sobre la tierra, y también ordenó a la tierra que diera a mi creación todo lo que había sido privado de la bondad, ya que tuve misericordia de ellos debido a este niño pequeño.
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Dios no ha hecho un pacto con nosotros ni con las personas de nuestra época para que estemos a salvo de tal castigo. Por lo tanto, debemos valorar el pan y todas las bendiciones. El pan puede cambiar el destino de una nación.
الكافي، ج6، ص302: علي بن إبراهيم عن أبيه عن هارون بن مسلم عن مسعدة بن صدقة عن أبي عبد الله [علیه السلام] قال:
قال النبي [صلی الله علیه وآله]: أكرموا الخبز فإنه قد عمل فيه ما بين العرش إلى الأرض و ما فيها من كثير من خلقه.
ثم قال لمن حوله: أ لا أخبركم؟
قالوا: بلى يا رسول الله! فداك الآباء و الأمهات!
فقال: إنه كان نبي فيمن كان قبلكم يقال له دانيال و إنه أعطى صاحب معبر رغيفا لكي يعبر به فرمى صاحب المعبر بالرغيف و قال: ما أصنع بالخبز هذا؟ الخبز عندنا قد يداس بالأرجل!!
فلما رأى ذلك منه دانيال رفع يده إلى السماء ثم قال: اللهم أكرم الخبز فقد رأيت يا رب ما صنع هذا العبد و ما قال!
قال: فأوحى الله عز و جل إلى السماء أن تحبس الغيث و أوحى إلى الأرض أن كوني طبقا كالفخار.
قال: فلم يمطروا حتى أنه بلغ من أمرهم أن بعضهم أكل بعضاً! فلما بلغ منهم ما أراد الله عز و جل من ذلك قالت امرأة لأخرى و لهما ولدان: يا فلانة! تعالي حتى نأكل أنا و أنت اليوم ولدي و إذا كان غدا أكلنا ولدك! قالت لها: نعم! فأكلتاه فلما أن جاعتا من بعد راودت الأخرى على أكل ولدها فامتنعت عليها فقالت لها: بيني و بينك نبي الله!
فاختصما إلى دانيال [علی نبینا وآله وعلیه السلام] فقال لهما: و قد بلغ الأمر إلى ما أرى؟
قالتا له: نعم يا نبي الله و أشد!
قال: فرفع يده إلى السماء فقال: اللهم عد علينا بفضلك و فضل رحمتك و لا تعاقب الأطفال و من فيه خير بذنب صاحب المعبر و أضرابه لنعمتك!
قال: فأمر الله عز و جل السماء أن أمطري على الأرض و أمر الأرض أن أنبتي لخلقي ما قد فاتهم من خيرك فإني قد رحمتهم بالطفل الصغير.