Hola, en el nombre de Dios, les saludo una vez más dándoles la bienvenida a nuestro espacio “Los cuentos de la semana” de FátimaTV.

La historia de hoy, que trata sobre el ascetismo y la abstinencia de uno de los Inmaculados de la descendencia del profeta del Islam, la cual puede enseñarnos grandes lecciones. Esta historia fue seleccionada del libro Bihar Al-Anwar, así que vamos juntos a escuchar el cuento de esta semana.

El equipaje del camino

El narrador transmite:

“Iba con la caravana por el desierto, cuando me surgió una necesidad y me alejé de la caravana, cuando de repente vi a un niño caminando y dije:

¡SubhanAllah! ¡Qué hace este niño en el desierto sin agua ni forraje! Por lo que me le acerqué, lo saludé y con mucha cortesía me respondió el saludo.

Entonces le pregunte: “¿A dónde te diriges?”

Y el me respondió: “A la Casa de Dios”.

Continué: “Mi querido niño, tú estás aún muy pequeño y todavía ningún acto se ha vuelto obligatorio ni preferible para ti”.

Respondió: “¡Oh, Sheij! ¿Acaso no has visto a otros que han muerto, siendo más pequeños que yo?”

Así que pregunté: “¿Dónde está tu equipaje y tu montura?”

“Mi equipaje es la abstinencia y los que me trasladan son mis pies, y con este equipaje y montura me dirijo a mi maestro”. – Respondió el niño.

Entonces de nuevo le pregunté: “¿No veo que lleves comida?”

“¡Oh, Sheij! ¿Es correcto que alguien te invite y tú lleves tú comida a su casa?” Me contestó.

Dije: “¡No!”.

Continuó: “Aquél que nos invitó a su casa, nos dará agua y alimentos”.

Le dije: “¡Levántate y date prisa, para que alcances a la caravana y percibas la época del Hayy!”

Él dijo: “Es necesario que yo me esfuerce mucho para que Él (es decir para Dios),  me haga llegar. ¿Acaso no has oído que Dios dijo?:

﴿وَالَّذِينَ جَاهَدُوا فِينَا لَنَهْدِيَنَّهُمْ سُبُلَنَا وَإِنَّ اللَّهَ لَمَعَ الْمُحْسِنِينَ﴾

“Y a quienes se esfuerzan por Nosotros, ciertamente, les guiaremos a Nuestros caminos. En verdad, Dios está con quienes hacen el bien”. (Surah La araña 29:69)

Mientras hablaba con él, un elegante y apuesto joven vestido de blanco se nos acercó, saludó al niño y lo abrazó.

 Volteé a ver al joven y le dije: “¡Por Dios quien te creó tan bello, dime ¿quién es este niño?”

“¿Acaso no lo conoces? Él es ‘Ali ibn Husein ibn ‘Ali ibn Abi Talib” me respondió.

Entonces dejé al joven y dirigiéndome al niño le pregunté: “¡Por tus padres, dime ¿quién es este joven?!”

A lo que sorprendido me preguntó: “¿Acaso no lo conoces? –y continuó diciendo– El es mi hermano Jidr que viene y me saluda todos los días”.

Entonces exclamé: “¡Por el derecho de tus padres!, cómo viajas sin provisiones en éste desierto seco, sin agua ni forraje”. 

A lo que el niño dijo: “Pero yo, con equipaje y provisiones, atravieso el desierto y mi equipaje en este viaje son cuatro cosas:

“¿Qué son esas cuatro cosas?” –Le pregunté.

A lo que me explico así: 

Yo considero a todo el mundo tanto sus seres grandes como los pequeños y todo lo que hay en él, bajo el poder y reino de Dios. En mi opinión todas las criaturas son siervos de Dios y reciben su sustento de parte de Él. Y creo que todo el sustento y sus efectos se encuentran en manos de Dios y creo que el decreto divino penetra y fluye en toda la tierra de Dios”.

Entonces dije:

“¡Oh, Zain al-Abidin! El mejor de los equipajes, es tu equipaje. Con este equipaje puedes viajar perfectamente por los desiertos del Más Allá, mas que por los desiertos de este mundo.”

Gracias a este cuento, logramos ver la elevada posición de la descendencia purificada del Profeta Muhammad (BPD) quienes poseían una visión de las realidades de la vida y el mundo tanto material como espiritual, demostrando su esencia, valor y superioridad por encima de el resto de individuos, especialmente aquellos que ostentaban el poder desde la base de la corrupción y la tiranía en sus épocas. El carácter divino del Ahlul Bait (P) nos deja evidencia firme del dicho o hadiz Az Zaqalain o de los dos tesoros en el que el Mensajero de Dios nos insta a vigilar con atención el trato, cuidado y relación nuestra con el Corán y su descendencia purificada, así como del evento de Mubahila en la que enfatiza la importancia de su familia, lo que el mismo Profeta más amaba.

Hemos llegado al final y no me queda más que despedirme, deseándote lo mejor de esta y la otra vida, tanto a tí como a tus seres queridos, por favor cuídate y hasta la otra semana con un nuevo cuento.

FátimaTV 
Saberes que iluminan el alma 
Síguenos en youtube.com/FatimaTVes
O en nuestro sitio web FatimaTV.es