En el nombre de Dios, Hola, sea una vez más bienvenidos a la sección “Cuentos de la Semana” de FátimaTV
Teniendo en cuenta que estamos en el mes de Safar, dedicamos la historia de esta semana al viaje de los cautivos de Karbala a Sham. Las calamidades e indignidades que sufrió el Ahl al-Bayt después del martirio del Imam Al Hussain y sus compañeros no son menos que las calamidades del día de Ashura.
Así que los invito a escuchar juntos la historia de esta semana.
De Kufa a Sham
El 13 de Muharram, Obaidullah ibn Ziyad - عبيدالله بن زياد -, que estaba esperando la orden de Yazid, finalmente, después de recibirla y determinar la ruta de la caravana por Yazid, ordenó a Shimr شمر y Muhaffaz مُحَفَّز que enviaran la caravana de cautivos a Sham junto con las benditas cabezas de los mártires de Bani Hashem.
Las tribus de Kufa, debido a sus prejuicios tribales, no permitieron que las cabezas de otros mártires salieran de Kufa, mismos prejuicios tribales hicieron que después del martirio de Hurr, no le cortaran la cabeza y su tribu enterrara el cuerpo de Hurr en un lugar lejos de los mártires de Karbala.
Este es otro signo de la opresión hacia los Ahl al-Bayt, porque nadie tuvo prejuicios en contra de tomar las cabezas de sus mártires, para que pudieran evitar que las cabezas fueran llevadas en lanzas hasta Sham.
Antes de que la caravana se moviera, encadenaron las manos y los pies del Imam Sayyad hijo del Imam Al Hussain para llevarlos como esclavos a Sham.
La gente de Kufa, que conocía al Imam Hussain y sus compañeros, escoltó a los cautivos de Kufa a Najaf mientras lloraban. Se cuenta que la cantidad de personas que acompañaron a la caravana, era tal que el movimiento de dicha caravana se hizo más lento y recorrieron la ruta corta de Kufa a Najaf en un período de tiempo más largo, y cuando llegaron a Najaf, había pasado más de la mitad de la noche.
La caravana se había detenido en Naja, cuando ell Imam Sayyad quien estaba ahí dijo:
“Estos son los que nos mataron y nos están llorando ahora.”
Entonces la Señora Umm Kulthum ام کلثوم, la hija del Imam Ali se dirigió a la gente de la Kufa diciendo:
“Si el Profeta te pregunta qué hiciste con mi Ahl al-Bayt, mi familia y mi Ansar o auxiliadores, mientras que vosotros erais la última nación (o la Ummah امت , siendo algunos de ellos capturados y otros asesinados mientras se ahogaban en su propia sangre. ¿Cuál será su respuesta al profeta?”
La gente de Kufa, que había invitado al Imam Hussain, pero había dejado de ayudar al Imam, ahora solo lloraba y miraba cómo se llevaban a los prisioneros (cautivos) a Sham.
Finalmente, la caravana inició su movimiento de Najaf a Sham. El Imam Sayyad permaneció en silencio durante el camino y no habló con los soldados.
Por supuesto, no había esperanza de guiar a estos soldados porque la cabeza del Imam Hussein recitaba versos del Corán en el camino, las luces brillaban desde las cabezas hacia el cielo. Los lamentos de los genios se podían escuchar hasta la mañana. Los soldados vieron todas estas razones claras, pero estaban bebiendo vino y divirtiéndose.
El Ahl al-Bayt, a quienes el Profeta había puesto como un fideicomiso entre la Ummah, ahora sus manos estaban atadas a sus cuellos y fueron conducidos de ciudad en ciudad como esclavos, con trompetas y discordancia.
إِنِّی تَارِک فِیکمْ أَمْرَینِ إِنْ أَخَذْتُمْ بِهِمَا لَنْ تَضِلُّوا- کتَابَ اللَّهِ عَزَّ وَ جَلَّ وَ أَهْلَ بَیتِی عِتْرَتِی
أَیهَا النَّاسُ اسْمَعُوا وَ قَدْ بَلَّغْتُ إِنَّکمْ سَتَرِدُونَ عَلَی الْحَوْضَ فَأَسْأَلُکمْ عَمَّا فَعَلْتُمْ فِی الثَّقَلَینِ وَ الثَّقَلَانِ کتَابُ اللَّهِ جَلَّ ذِکرُهُ وَ أَهْلُ بَیتِی
Sí, el Profeta Muhammad había dicho que:
«Yo dejo entre vosotros dos asuntos, si os aferráis a éstos, nunca estaréis extraviados; el Libro de Dios, Poderoso y Exaltado, y mi Ahlul-Bait, mi familia.
¡Oh gente! escuchad que os informo, que cuando volveréis a mí al lado de la Fuente (en el Más Allá), os preguntaré sobre su comportamiento respecto a estos dos tesoros, que son el Libro de Allah y mi Ahlul-Bait.»
Volviendo a la historia:
Yazid había ordenado llevar a los cautivos de las ciudades que son cristianas, para que la gente de esa ciudad pudiera ver que Hussain, quien estuvo presente en los brazos del Profeta en el día de Mubahala junto con el Imam Ali, la Señora Fátima y el Imam Hassan, ahora su cabeza está en la punta de una lanza.
Por supuesto, los cristianos también se entristecieron al ver el destierro y la opresión de los mártires y cautivos. Tenemos en la historia que algunos de ellos creían en el Islam porque se dieron cuenta de la verdad de Ahl al-Bayt (la paz sea con ellos).
La caravana estaba cerca de la ciudad de Sham. Zahr ibn Qais Yoafi زَحرِ بن قَیسِ جُعفی más pronto que la caravana fue ante Yazid con la cabeza bendecida del Imam Hussain y le presentó también la carta de Ibn Ziyad a Yazid para que estuviera seguro del martirio del Imam Hussain y preparara la ciudad para la celebración y la alegría por el momento de la llegada de los cautivos.
Por orden de Yazid, la cabeza del Imam Hussain se unió nuevamente a la caravana para ingresar a Sham con la caravana.
La llegada de la caravana de cautivos junto con las cabezas cortadas de los mártires de Karbala a Sham ocurrió en la fecha del 1 de Safar, después de muchas penurias y sufrimientos.
Esta caravana estuvo en camino entre Kufa y Sham desde el 13 de Muharram hasta el 1 de Safar. Mientras tanto, los opresores movieron la cabeza bendita del Imam Hussain (as) a los hombres y mujeres cautivos de Ahlul-Bait del Profeta hasta que llegaron a la ciudad de Damasco.
Umm Kulthum ام کلثوم se acercó a Shimr, quien era uno de los opresores, y le dijo:
¡Tengo una petición para ti!
Shemr dijo: ¿Cuál es tu petición?
Umm Kulthum dijo:
Ahora que hemos llegado a la ciudad de Sham, si quieres llevarnos a la ciudad, llévanos a través de una puerta que tenga menos espectadores para que menos personas nos miren, y ordena que las cabezas de los mártires sean sacados de entre nosotros, los soldados moverán las cabezas más adelante y más lejos de la caravana ¡Para que la gente mire las cabezas y nos mire menos porque somos humillados por la multitud de sus miradas hacia nosotros en esta situación!
Shemr se comportó en contra del deseo de la Señora Umm Kulthum por crueldad y blasfemia y ordenó mover las cabezas con lanzas en medio de la caravana.
Uno de los reporteros y testigos de los hechos en el momento de la llegada de la caravana de prisioneros de Karbala y las cabezas de los mártires a Siria fur "Sahl ibn Sa'd - سَهلِ بنِ سَعد".
Es uno de los últimos compañeros del Profeta que murió en Medina y estaba en esta zona cuando llegó la caravana de Ahl al-Bayt y la cabeza bendita del Imam Hussain a Sham.
Sahl describe la historia de la siguiente manera:
“Salí de Medina con la intención de visitar Baytul Mughaddas - بیت المقدس (o Jerusalén).
En medio del camino llegué a Sham, la cual era una ciudad llena de agua y árboles, con muchas casas altas, cuando vi que adornaban los bazares colgando cortinas y la gente estaba feliz y tocando panderetas e instrumentos.
Me dije a mí mismo, ¡tal vez hoy la gente de Sham tenga un Eid o fiesta que no conozco!
Le pregunté a la gente:
¿Tienes un Eid o fiesta que no conocemos?
Ellos me preguntaron:
¡Oh viejo! ¿Eres un extraño en esta ciudad?
Yo dije:
¡Soy "Sahl ibn Sa'd - سَهلِ بنِ سَعد", he visto al Profeta de Dios y he escuchado narraciones de él!
Dijeron: Oh Sahl, nos sorprende por qué la sangre no cae del cielo y por qué la tierra no se derrumba y se traga a sus habitantes.
Dije: ¡¿Por qué debería ser así?!
Dijeron: porque esta alegría y felicidad es por que la cabeza bendita del Hussain ibn Ali está siendo traída de Irak a Yazid como un regalo, y llega ahora mismo.
Dije: ¡Qué raro! ¡Se llevan a la cabeza de hussain como regalo y la gente está contenta! ¿De qué puerta de la ciudad vienen?
La gente señaló una puerta o باب llamada la Puerta o Baab Sāʿāt ( الساعات)
Fui a esa puerta. Fue allí que vi venir las banderas una detrás de otra y de repente vi venir un jinete el cual tenía una lanza rota en la mano y en ella la cabeza bendita del Al Hussain. El rostro de dicha cabeza cortada era el más parecido al rostro del Mensajero de Dios, el Profeta Muhammad.
Junto con ellos, trajeron mujeres montadas en camellos sin equipo.
Me acerqué a una de esas mujeres y le dije:
¡Oh niña! ¿Quién eres tú?
Ella me dijo: ¡Sukaina (سُکَینَة), la hija de Hossein!
Le dije:
Soy el compañero de tu abuelo, el Profeta Muhammad ¿Tienes alguna petición para mí? Soy Sahl ibn Saad, quien vio al Profeta (la paz sea con él y su bendita familia) y escuchó narraciones de él.
“Oh anciano, dígale a esta persona desgracia que lleva la cabeza de mi honorable padre que se aparte de entre nosotros y ponga la cabeza delante de nosotros para que la gente se divierta al verlo y no nos mire porque somos la familia íntima y cercana del Profeta de Dios.”
Me acerqué al portador de la cabeza y le dije, ¿aceptarías mi pedido de recibir cuatrocientos dinares a cambio?
Él dijo: ¿Qué quieres?
Dije: Mueve la cabeza frente a la familia del Profeta. Saca la cabeza de entre las mujeres y ve delante de ellas.
Fue entonces como èl hizo lo que le dije y le pagué lo que le había prometido.
Hemos llegado al final y ruego a Dios que te de lo mejor de esta y la otra vida tanto a ti como a tus seres queridos, por favor cuídate y hasta la otra próxima semana.
FátimaTV
Saberes que iluminan el alma
Síguenos en youtube.com/FatimaTVes
O en nuestro sitio web FatimaTV.es