En el Islam creemos que la vida terrenal es como un puente hacia la otra vida.
En el Islam existe la posibilidad de arrepentirse de los malos actos y cambiar el devenir de nuestras vidas.
Aquel que peca y desobedece a Dios es comparable a quien se aleja de su humanidad y se acerca a su animalidad, por eso es necesario el arrepentimiento para poder volver a nuestro lugar de origen.
El arrepentimiento no solo es interno y psicológico, sino conductual y práctico.
El arrepentimiento es sobre dos tipos de pecado: Los internos (éticos) y los externos.
El arrepentimiento tiene varios tipos de beneficios dentro de los cuales se encuentran la transformación de las malas acciones en buenas acciones, el amor divino, etc.
Cuando hablamos de piedad o temor a Dios en el Islam, nos referimos al estado del alma que nos ayuda a alejarnos del pecado y a cumplir con nuestras obligaciones.
La piedad es un estado del alma que se origina en el temor a Dios y tiene como resultado el abstenerse de los pecados y el zafarse de las cadenas de satanás.
La piedad se vuelve sumamente importante en el Islam por los efectos transformadores que tiene a nivel material y espiritual.
Otro de los beneficios de la piedad es que nos permite alejarnos del pecado y abandonarlo.
Entre los beneficios de la piedad está el acrecentar el sustento y otros beneficios terrenales.
El fanatismo significa defender cualquiera tipo de persona, institución, tribu, familia, clan, zona, zona, país y etc. En toda situación, en todo momento y en cualquier condición aunque esté equivocado.